miércoles, 22 de abril de 2009

FLIGHT 666 - Reseña

La Maidenmanía aún tiene para rato. Al menos por acá. Como ya todos saben, ayer fue el estreno mundial de la peli FLIGH 666 que documenta la primera parte de la gira Somewhere Back in Time de Iron Maiden en su parte 2008. Lástima que es la parte que no incluye Perú. El film fue hecho por Sam Dunn y Scot McFadyen, cieneastas y antropologos canadienses conocidos por otros documentales acerca del heavy metal y que fueron contactados por la propia banda al ver la calidad de sus anterior trabajo.

La película es una serie alucinantes tomas en vivo y de entrevistas a los integrantes de la banda dejando claro puntos como el origen de la idea de obtener un avión propio para el tour lo cual les sale beneficioso ecomomicamente y le haría mucho más fácil ir a sitios que jamás antes habian visitado, como sucedió con Colombia, Costa Rica y creo que Puerto Rico también y posteriormente con Perú y Ecuador. También se nota las ganas de dejar en claro cada uno de las personalidades y roles de cada miembro en la banda: el bajista Steve Harris, compositor principal y hacedor de ideas que hacen de Iron Maiden el mega monstruo que es. Por su aprobación pasan todas las propuestas que conciernen al grupo desde lo musical, la imágen, el sonido, etc.. Es su banda. El más reservado de todos. Un genio. En vivo es un tornado que corre de un lado a otro y que con facilidad puede ocultar los cincuentaitantos años que ya tiene encima; el vocalista Bruce Dickinson que, aún con la voz intacta, repito: intacta, es el frontman con mayor dominio de escena que se haya visto. Piloto comercial y campeón de esgrima. Capaz de hacer gritar a 50,000 personas con un solo gesto. Es el segundo mayor aportador de ideas después de Harris. Además piloteó en la mayoría de tramos el avion que los llevó de gira. Para los que no saben, este señor ya tenía una buena bolsa de horas de experiencia en vuelo que incluyen rutas comerciales y el trasaldo de tropas de la armada real británica a las zonas en conflicto en el medio oriente. Además es autor y locutor de radio. ¡Qué más personaje!; el envidiable perfeccionismo de Adrian Smith (mi guitarrista favorito de Maiden), con estilo rocanrolero para tocar la viola y compositor de los mejores solos de la banda; la delicadeza, elegancia y sutileza de Dave Murray. Pulcrísimo. Como siempre casi inmóvil en el escenario. Modestia en vivo que muchos deberían tener como ejemplo; Janick Gers, que fue muchos años para mí una especie de Yoko Ono del metal se ganó todo el respeto. Aparte de su virtuosismo y haberse ya convertido en importante compositor de la banda (como muestra: la canción Dance of Death del album del mismo nombre es su obra) es un malabarista de la guitarra; y por último pero no por eso menos, Nico McBrain en la batería demuestra que es uno de los mejores en su puesto en todo el mundo. Merece una película aparte. El más divertido de todos. Si todos los demás son unas señoronas inglesas amantes de la esgrima, tenis, golf y demás pasatiempos propios de una selecta clase de aristócratas recatados que ya son, éste es el que hace la diferencia con creces. Demente de mierda. El más cagado de risa. Clásico humor inglés.

Además hay anécdotas con los demás integrantes del staff: manager, productores, sonidista, plomos, técnicos, aeromozas, etc. y de cada país visitado. Lo más destacable: el ambiente y juerga metalera en Australia, el abuso policial en Colombia y el colocho que llora inconsolablemente (caso que de hecho se repitió en muchos otros conciertos, incluyendome pero no desconsoladamente en lo que me tocó vivir en Santiago y Lima) después que pudo agarrar una de las baquetas que lanzó Nico al público, la iglesia Maidenesca de Brasil (así es: una verdadera iglesia con sacerdote, templo, doctrina y todo), la cada vez más creciente y entusiasta fanaticada chilena que, según recientes palabras de los mismos integrantes de la banda, se está convirtiendo en su preferida sudamericana junto a la brasileña, el partidito de futbol Maiden-Sepultura, la maidenmania en la India, el acoso de la fanaticada argentina y toda la parte de latinoamérica además de los excitados comentarios de Tom Morello de Rage Against the Machine y el antipático enano Lars Ulrich de Metallica.

Punto en contra: jamás tocaron el tema del abucheo (sí leyeron bien: ABUCHEO) que sufrieron en Buenos Aires cuando Bruce flameó la bandera británica en la canción The Trooper trayendo los oscuros recuerdos de las Malvinas. Bueno, cada uno muestra lo que le conviene.

No contaré más. Veanlo uds. mismos y, como dice la publicidad, sean parte de la más grandiosa aventura del rock. Tienen dos oportunidades más: este viernes 24 y sábado 25 de abril en el Cine Planet del Real Plaza del cada vez menos olvidado Trujillo. Me datearon de muy buena fuente que Trujillo fue elegida para estrenar el film , aparte de Lima, debido a que fue la provincia peruana de donde viajó más gente para ver a Maiden el marzo pasado a la capital. Somos lindos, dí?

El film ya ha ganado el premio "24 Beats Per Second" del Festival South By Southwest de Austin , Texas al "Mejor Documental Musical" del año. Este premio se suma al que han recibido este año también en los Brit Awards a la mejor actuación en vivo de una banda británica ("Best British Live Act").

Dato adicional: la película será editada también en doble DVD en los próximos meses, pero nada como verlo en el cine.

Próxima parada: la salida del nuevo disco de Maiden el 2010, lo que de hecho lo convertirá en uno de los más vendidos de la historia del rock, y la gira mundial de rigor. Desde ya Perú está confirmado.

UP THE IRONS POR LA RECONCH...!!!

lunes, 20 de abril de 2009

Confirmadísimo: Iron Maiden - Flight 666 en Trujillo

21, 24 y 25 de abril en el Cine Planet del Real Plaza de Trujillo: Iron Maiden - Flight 666. Nos vemos!

UP THE IRONS!!!

miércoles, 8 de abril de 2009

FLIGHT 666 en Perú.

El 21, 24 y 25 de abril se proyectará en los multicines CINEPLANET el esperadísimo film FLIGHT 666 de Iron Maiden, que documenta la primera parte de la reciente gira Somewhere Back In Time en su parte 2008. Esperemos que los dos locales de Truijillo y los de las demás provincias estén también incluídos en esta programación. Aún no detallan ese dato. Así que vayan juntando su platita para verlo una, dos, tres, mil veces.
Chequeen:
UP THE IRONS por la reconch...!!!

jueves, 2 de abril de 2009

Reseña de Iron Maiden en Lima: Parte II

Al finalizar el show de la pequeña Harris, la gente estaba ya loca, delirante, eufórica y desespereada por ver a sus adorados Iron Maiden tocar en vivo en Perusalem. Puta mare, aún no me la creo: Maiden en Perú carajo!!! Se acabó toda esa huevada de que me voy a Chile o a Argentina a verlos. A la mierda!!! Maiden en Perú!!! El sueño máximo hecho realidad. A las 9:00 en punto, hora inglesa, las pantallas gigantes empezaron a proyectar parte del próximo documental FLIGHT 666 que se estrena en 20 días en los cines del mundo. Escenas de su avión ED FORCE ONE, aeropuertos y hoteles repletos de metaleros y estadios enteros rindiéndose ante ellos. Esta película trata de la primera parte de la presente gira de Maiden al rededor del mundo y el extracto, al igual que en toda la gira, tiene como fondo Transylvania que es una instrumental que está en el primer disco Iron Maiden (1980). La gente ya sabía lo que se les venía. De repente todo se apagó y solamente quedaron algunas luces muy tenues en el escenario. Se empezaron a escuchar los motores de aviones caza ingleses. Es el Churchill Speech, reproducción del discurso que Winston Churchill dió al pueblo inglés en 1940 en plena segunda guerra mundial días después que cayó Francia y los nazis se iban sobre la isla: “Defenderemos nuestra isla, cualquiera que sea el costo, pelearemos en los campos y en las calles, pelearemos en las colinas: nunca nos rendiremos!!!”. En ese momento ya los teniamos frente a frente. Increíble. Nos desahuevaron.. Iron Maiden a 20 metros de mí. De fondo la portada gigante del Powerslave con el Eddie esfinge. Ahhhhhhhh....!!!! Nada más emocionante que esa última frase de Churchill porque todos sabían que estaba pegada a las primeras armonías de Aces High que cuenta la historia de un piloto británico peleando contra la Luftwaffe, la fuerza aérea de Hitler. La gente explotó: ”Ruuuuun...Live to flyyyy!!!! Fly to liiiiive...!!! Aces Hiiiiigh...!!!”. Locura extrema. A pocos metros del escenario que es donde yo estaba la gente era simplemente una marea humana, irónicamente la mayoría eran chibolos que no pasaban de los 20 pero que eran los que menos se emocionaban. Maravilla. Mosh y pogo general. La pegaron con Wrathchild y la genial 2 minutes to midnight, autoría de mi guitarrista favorito de Maiden el señor Adrian Smith, que desató un pogo brutalizado. Es al comienzo de esa canción que Bruce dijo los primeros “Scream for me Limaaa...!!! Scream for me Peruuuuu...!!!” Puta madre creo que ni el gol de media cancha del Chorri ante Uruguay en el mismo estadio en las eliminatorias a Francia 98 se gritó ni se esperó tanto como la conocida frase de Dickinson. Ni la jugada de Cueto antes de darle el pase a Barbadillo para el segundo gol de Perú en las eliminatorias de México ´86 en el monumental de River nos hizo tocar cielo como ese preciso instante. Qué puedo decir???!!! Que se joda el mundo. Se produce el primer contacto de Bruce con el respetable. Sin exagerar les puedo decir que el viejo y conocido “OLE OLE OLE OLEEEE MAIDEEEEN MAIDEEEEN...!!!!” fue coreado por más de 3 minutos. Cosa que emocionó bastante al chato cantante sentándose sobre un monitor por un momento a ver la panorámica del estadio ovacionando a su banda y él haciendo un gesto como diciendo “Puta mare no me hagan esto, chicos, no lo merecemos, no es para tanto” o “Porqué mierda no vinimos antes a Perú? En qué estabamos pensando?”. Se veía claramente que la emoción era recíproca. Era un romance entre la banda y la fanaticada. Así de simple. Sus compañeros de banda sonreían sorprendidos haciendo amables gestos a la gente. Señores británicos pues. Cuando por un lado del estadio la barra parecía acabar, otra tribuna la hacía más fuerte y contagiaba aún más a las otras. Piel de gallina. Parecía coro de nunca acabar. Gracias a la vida por el rocanrol!!! Gracias a todos los dioses por habernos dado la oportunidad de vivir esto. Por culpa de internet el set list ya no era sorpresa, pero cuando sacaron Children of the Damned, canción que casi nunca tocaban en vivo, muchos nos emocionamos, es uno de los mejor tracks del Number of the beast. Siguieron la virtuosa Phantom of the Opera que es una total obra maestra. De pronto, la más esperada de la noche: The Trooper que con su ritmo galopante habla sobre la batalla de Balaclava durante la guerra de Crimea (una especie de guerra santa del s. XIX), una catástrofe para el ejército inglés que sufrió el aniquilamiento de los famosos 600 hombres de su caballería ligera a manos de los rusos que los llenaron de cañonazos por ambos lados. La letra es muy emocionante. Dickinson con su traje de los famosos chaquetas rojas ingleses flameaba 2 banderas británicas orgullosamente. Como si esto fuera poco y para seguir maltratando nuestro ya trajinado corazón siguieron otra obra del buen Adrian Smith: la nostálgica Wasted Years que es mi favorita no solo por la música sino también por la letra que es un llamado a no mirar atrás en los años sino a construír tu futuro mirando hacia adelante. Algo así. Además tiene uno de los mejores solos de guitarra de la historia del rock. Debo reconocer, oh amigos míos!!!, que el bobo y los recuerdos me traicionaron y brotaron mis segundas gotitas de la noche, las primeras fueron con el tema anterior. Snif! Al comenzar esta canción es que en la zona The Trooper (delante del escenario) se desplegó una enorme banderola que casi cubría a todo público de ese sector. Hasta ahora me pregunto qué mierda decía ahi. Creo que nadie lo sabe. Rime of the ancient mariner toma el nombre de un clásico poema del inglés de Samuel Taylor Coleridge y narra historia de un anciano marinero y su travesía en el mar hasta una especie de redención consigo mismo. Esta canción tiene una de las partes más emocionantes del concierto donde se oyen partes del poema original con un fondo tenebroso de bajo y guitarras con delay trabajadas con el volúmen de la guitarra. Una pieza clave en todo show de Maiden. Imágen clásica del Live After Death de 1985 y estabamos dentro de ella. Una de las mejores partes de la noche. Siguió Powerslave y otro momento pico con Run to the Hills y su épica historia de la conquista de los ingleses a Norteamérica, vista del lado europeo pero de manera muy imparcial. Otro ritmo galopante. Lo que vendría serían dos obras maestras, ambas con comienzo lento y oscuro a la vez. Fear of the Dark que calentó a la gente hasta el cansancio casi definitivo debido a su corito casi pelotero y el pogo que ocasiona su cambio de ritmo y Hallowed be thy name, el clásico por excelencia de la banda contando los pensamientos de un condenado a muerte en el preciso instante que va camino a la horca. El público ya estaba en el bolsillo de Dickinson. El dominio de escena y potencia de este chato no lo tiene nadie. Hizo gritar al público tan solo parandose en el medio del escenario levantando las manos mismo director de orquesta. Siguió Iron Maiden y la aparición de Eddie cyborg. Algo para lo cual todo metalero ha dedicado su vida: ver a Eddie en vivo. El fin de toda digna existencia. El éxtasis llegó al ver a este ícono mundial del rock recorrer el escenario. Al final de esto la banda saluda al respetable. Por fin aparece el baterista Nico McBrain y se acerca al público. Todos lanzan sus púas y muñequeras al público. Para esto, a cada que tiraban algo la gente se tiraba como pirañas. ¡Lo que haría por poder ver de cerca tan solo uno de esos preciados objetos! ¡Lo que haría! ¿Alquimismo? Nico lanzó un parche de batería. Siempre el más ovacionado. La clásica “Ni-co Ni-co Ni-co Ni-co!!!” no tardó en llegar. La peregrinación ya estaba consumada. Después de esto ya nada importa.
Acá se produjo el bis de la noche o como dicen los gringos, el “encore”. La banda se metió al backsatge acondicionado con un bar de piscos peruanos y motivos tradicionales, según la prensa local, solicitado por ellos mismos. De pronto se oye la voz del genial Vincent Price haciendo la introducción a The number of the Beast con la lectura del extracto del libro del Apocalipsis. Sin duda el tema más popular de la banda. La gente estaba cansada pero ahi estábamos dándole al galope. Se incluyeron llamaradas en cada uno de los redobles iniciales de la canción. Era el infierno, señores. El infierno tal cual lo vió Steve Harris en el sueño en que se inspiró para componer semejante pedazo de canción. Lo que vino fue un tema que jamás pensé ver en vivo: The Evil that men do del disco Seventh son of the Seventh Son, disco que marcaría la evolución a un Maiden más maduro y trabajado. Terriblemente melódica y a la vez fuerte sería lo más exacto para describir a este tema que tiene uno de los mejores coros jamás escuchados. Para acabar, la misma canción con la que acaba el Live after Death del 85: Sanctuary, no creo que sea la favorita de nadie pero se agradece el detalle.




Solamente queda agradecer a Iron Maiden por ser siempre como Iron Maiden puede ser. 6 musicazos que lo dan todo en vivo. Envidiable estado físico de Dickinson y Harris que corrían por todo el escenario como en los viejos tiempos. Voz impecable y bajo de guerra respectivamente. Un magistral y siempre alegre Nico McBrain en la batería, Adran Smith y Dave Murray muy recatados pero perfectos en la ejecución de sus guitarras y un capítulo aparte es Janick Gers en la oooootra guitarra quien, aparte de las piruetas y malabares con la viola, demostró que la verdadera actitud rocanrolera no se pierde con los años.
El show pudo ser opacado por el hecho de que el organizador no cumplió con muchas de sus promesas: 5 Eddies, pirotecnia importada especialmente y no sé qué otro floro barato. Nada raro en un país donde la improvisación es parte de nuestra tradición. También la pasividad de la gente en no reclamar forma parte de lo nuestro.
Aún así se trata de rocanrol, el viejo rocanrol. No es imprescindible fueguitos artificiales ni lucecitas para un buen show de rocanrol y lo sabemos. Los que fuimos a ver a los ex-The Doors en la explanada del monumental lo sabemos. Ese fue el mejor ejemplo de buen, viejo, sucio y puro rocanrol.
Al final del show en el nacional y extasiados al máximo nos largamos a Fiori con mis viejos compañeros de ruta (más viejos que compañeros)para retornar a la primaveral ciudad y volver con la rutinaria existencia de ser una micro partícula del sistema, una pequeñísima parte del engranaje. El gusto de ver a una de las mejores bandas aún vigentes de la historia estaba aún en la retina y en los oídos. UP THE IRONS conchesum...!!! Nos volveremos a ver las caras el 2011. Ahi les dejo unas fotitos que sé que serán de su agrado. El 99.99% de ellas fueron tomadas por este humilde servidor. Son de excelente resolución así que aprovechen en bajarselas. Como dicen los adultos: "Quedo de uds. y a la espera de cualquier comentario".











Reseña de Iron Maiden en Lima: Parte I

No puedo dejar de reseñar esto. Hace exactamente una semana 35,000 puntas fuimos testigos de la histórica presentación de Iron Maiden en el Perú. El mejor show metal en vivo de todos los tiempos se iba a dar en la gris ciudad. Hoy, aún en estado de shock por la impresión y la emoción encima, ya puedo dar un testimonio ¿imparcial? de lo que pasó ese día perfecto: el día que vimos a Maiden en nuestro terruño. Verlos en Chile hace un año fue de la puta madre también, pero verlo en casa con tus patas de siempre con los que los escuchaste desde hace más de 20 años es otra cosa. Se te vienen a la mente miles de recuerdos de esos años dorados del metal mundial: los cuadernos de colegio forrados con la clásica página central de las revistas alemanas BRAVO que casi siempre traían fotos de ellos allá por los 80´s, los covers que Orgus sacaba, el video Live After Death cuando lo vi por primera vez en el Golf en casa del primo de mi primo de mi primo y “decía quién mierda son estos locos?” y saliendo un Eddie de 4 metros al escenario, el tío Gerardo Manuel pasando la primicia de la semana de Maiden en su Disco Club del Canal 7, el Rock en Rio I de 1985 transmitido por Panamericana y donde se vió a Bruce Dickinson sacarse sangre accidentalmente de la frente con la guitarra mientras tocaban Revelations, la Orda Metálica reuniéndose en el óvalo papal a finales de los 80´s antes que pongan esa inútil cruz, tus viejos y profes diciendote “no escuches esa música de mierda porque es satánica y estos unos drogadictos”, algunos estúpidos compañeros de colegio diciéndonos “metalero” a manera de insulto, y un laaaargo etcétera. En fin, miles de huevadas recontra anticuchas que se te pone la piel de gallina tan solo de pensar que estabamos en la misma ciudad que los ingleses, bajo el mismo puto cielo, respirando el mismo smog y recorriendo las mismas calles...Aaaaarrrrgggghhhh...!!! Solo un verdadero fan puede comprender esto perfectamente. Si no lo eres, mejor no sigas leyendo porque lo más probable es que no te interese lo que viene.

A ver. ¿qué se puede esperar del primer concierto de Iron Maiden en Perú? Simplemente pura perfección, mucho pero muuuuuucho sentimentalismo y demasiada emoción. Es una deuda que los metaleros peruanos nos la teníamos que cobrar cuanto antes. 33 años de Maiden no es cualquier huevada y a diferencia de otras bandas que han venido por acá, ellos SIEMPRE han seguido vigentes y sacando discos sin parar. Con Dickinson o sin él. Con Smith o sin él. Nunca dejaron de tocar, hacer giras, editar nuevas producciones... CREAR o MORIR!!!. No dormir en sus laureles ni vivir contando a la gente lo grandiosos que fueron ni mostrar soberbiamente sus lujosas mansiones y lo bien que viven. Las fallas de la organización en cuanto a la pirotecnia (otra metida de dedo más al público peruano) y otras cosas más leves no fueron razón para que éste concierto, sin duda alguna, sea junto al de Roger Waters el mejor y más histórico de lo que va de la triste y pobre vida rockera del Perú. Como dijo Niche: Cali es Cali, lo demás es loma.

Con mis dementes hermanos de siempre quedamos en salir a Lima en una conocida agencia un día antes del show. Pero al llegar al terminal ¡¡¡oh sorpresa!!!: eramos más de 20 los que viajabamos en el mismo bus. La mayoría conocidos. En otros horarios y agencias salían más en plan peregrinación. Es que es Maiden pues papá!!! La más grande banda de heavy metal que haya parido la humanidad y la que da uno de los mejores shows en vivo de siempre. Pocos grupos generan esta pasión: la banda metal por excelencia.
Llegando llegando nomas fuimos a hacer nuestra colita al coloso José Díaz. 7:30 a.m. A hacer acto de presencia un ratón para luego dejar la cola encargada a un metalerito limeño y a una mancha de characatos que estaba por ahi. Unas arequipeñitas que pa´ qué te cuento. Estaban para raptarlas. Necesito conocer Arequipa pero ya! y de forma urgente. Todos nos fuimos a hacer nuestras cosas y nos volvimos a juntar en la cola entre 12 y 1 p.m. El ambiente era de fiesta. Qué clásicos ni clásicos!!! A diferencia acá nadie iba a perder. Al contrario. Nos ibamos a ganar con uno de los mejores shows del mundo. No en vano Maiden ganó hace pocas semanas el Brit Award por el mejor show en vivo y, lo que me da más gusto, pasando por encima de mariconadas como Coldplay, The Verve y otros bandas indecibles para mí, insufribles, impronunciables. Orgullo metal. Nadie que se precie de buen rockero o metalero podía faltar a este solemne acto. Jamás me imaginé que existiera tal cantidad de polos de Maiden. Creo que un 70% del respetable tenía uno puesto. Yo era parte del otro 30%. Había un grupo de puneños que estaba con un par de días de anticipación acampando afuera del estadio. También hubo gente de Piura y Bolivia y de hecho de muchos lados más.
Maiden siempre fue una banda cuya fama se ha hecho de boca en boca, en los 80´s gracias al tape-trading (intercambio de cassettes) y la edición de fanzines y revistas y en los 90´s gracias a la tecnología en internet. Sin apoyo de radios ni del bodrio MTV (salvo de programas especializados). Sus impecables shows en vivo los convirtieron en leyenda y de la mano de su líder, fundador y principal compositor, el bajista Steve Harris, editaron discos adelantados para su época: The Number of the Beast (1982), Piece of Mind (1983) y Powerslave (1984) que para mí forman un trilogía casi inigualable. Este último los llevó a hacer una de las giras más grandes y exitosas de la historia del rock entre 1984 y 1985 y que los trajo cerca y por primera vez a suelo sudamericano en el mítico Rock en Rio I de 1985 ante 300,000 personas y cuya actuación empezó exactamente faltando dos minutos para la medianoche en honor al single del Powerslave, 2 minutes to midnight. Hablo del WORLD SLAVERY TOUR: 23 países, 191 conciertos, 331 días y que están rememorando con la gira actual que empezó en Febrero del 2008 en la India y acaba en Miami justo hoy 02 de abril y donde el set list está compuesto solamente de canciones de la época dorada de la banda hasta 1992. Aquella lejana gira dió lugar a la edición de uno de los albumes en vivo más recordados: Live After Death. Nunca entendí porque ese disco lo sacaron con la grabación del concierto del Long Beach Arena de California y no con la del Rock en Rio I de Brasil. Cosas del Orinoco.

Volviendo a lo nuestro: las puertas del Estadio Nacional se abrieron a las 3 p.m. A correr!!! Había que ganar la mejor ubicación posible. De arranque nos ubicamos a unos 20 metros del escenario. Cerquísima. Todo estaba tapado con mantas negras hasta que pasen las bandas teloneras que eran M.A.S.A.C.R.E. de Perú y Lauren Harris que es la hija de Steve Harris, bajista de Maiden. No hubiera importado si no habían teloneros. Nadie los necesitaba. La gente solamente hablaba y había ido por una sola cosa. Todo lo que vendían adentro del estadio estaba super caro. Un miserable helado que normalmente está S/.1.00 afuera, adentro estaba 3.00. Por la cerveza ya ni pregunté. El agua 2.00 soles. Normalmente está a 1.00. El olor de la verde hoja que te hace reír era intenso por ratos. Era una fiesta. Todos estabamos felices. Apretados pero felices. Los souvenirs oficiales de la banda hicieron que caiga en la tentación de llevarme un polo y el folleto oficial de la gira.
A las 7 arrancaron los limeños a tocar y la gente respondió sorpresivamente muy bien. Nunca los respeté tanto hasta ese día. Buen show. Bien parados en escena y muy conchudos al tocar. Mucha actitud. Lo que les falta a muchas bandas peruanas para hacer un buen show: concha, huevos, desahuevar a la gente, cagarse en la nota. Todo estaba bien ejecutado. Bien tocadito. Esta banda es de mediados de los 80´s y fueron muy populares en su época sobretodo en Venezuela donde, si mal no recuerdo, les editaron un L.P. cosa que acá solamente salió en cassette. Nivel técnico aceptable. No son unos Mortem pero con esto demuestran que son de lo mejor en metal peruano actual. Se fueron muy emocionados: telonearon a Maiden pues carajo! Qué más puede pedir una banda metal?! Fueron bastante aplaudidos. Sobresalió El Hechizero, vieja canción de su primera época ochentera. En realidad hicieron que me trague mis palabras.
Luego siguió algo por lo que mucha gente sentía curiosidad: la banda de Lauren Harris o mejor dicho, la bandita de la hija de Steve Harris. Al maestro no se le niega nada. Al maestro se le respeta carajo! Creo que más por respeto a él es que la gente respondió y la apoyó todo el rato. En realidad no era nada del otro mundo. No hay que negar que la niña es una completa belleza pero su voz, al menos en vivo, es para el olvido. Debería pedir consejos a su tío Bruce de manera inmediata, de manera urgente. Su banda es buena. El guitarrista es de otro planeta. Un ídolo en las seis cuerdas. Sin duda el show fue de él. Esta nena tiene la suerte de haber teloneado a Maiden en casi toda la gira desde el año pasado. Repito que su música no es nada nuevo: un hard rock no tan alegrón que digamos pero sumamente digerible. Lindo para una radio. Enfatizo que tiene a un maestro en la guitarra que fue ovacionado al finalizar su presentación. A la ñaña le sobra carisma y buena onda. Salir a cantar descalza (que es algo que hace a menudo según veo en la web) es siempre señal de buena onda pues. Cosa que se agradece. El respetable la apoyó en todo momento, demasiado diría yo. Por más que se haya dicho que es una especie de Avril Lavigne del metal, yo la defiendo porque para empezar no llega a ser metal lo que hace y para terminar no se la ve posera como a la insoportable canadiense. Es un hard rock complaciente. Escuela le sobra y creo que tiene futuro así no haya inventado la pólvora., no exactamente por sus virtudes sino por haber nacido en cuna de oro, o en este caso, en cuna de metal.